¡Agarrar al capitalismo por los huevos! Eso es, exactamente, lo que persigue Gospodin, protagonista de “Gospodin”, tragicómica obra del autor alemán Philips Löhle (1978), que se estrenará por primera vez en Chile bajo la dirección de Néstor Cantillana, el 25 de noviembre en el Teatro de la Palabra.
El texto, que podría calificarse como una comedia negra, tocará profundamente a todos aquellos que alguna vez han criticado el sistema y han sentido la necesidad de liberarse de sus ataduras. Gospodin, protagonizado por Pablo Schwarz, es un hombre común que subsiste con las monedas que recibe cuando pasea a su llama – que vive en el sótano de su casa- por las calles de Berlín. Pero su rutina da un giro cuando Greenpeace le confisca al animal porque la fría ciudad no es su hábitat natural. Entonces, Gospodin decide no trabajar más.
Por supuesto, su entorno inmediato no comprende esta radical decisión. Su mujer lo abandona y sus amigos lo tildan de loco. El protagonista sólo quiere liberarse de la enorme presión del sistema que obliga a todos a ganar dinero, y resume su filosofía en 4 dogmas: “Hay que descartar una escapatoria” (huir es demasiado sencillo), “El dinero no puede ser necesario” (el sistema se basa en el dinero), “Hay que abstenerse de toda propiedad” (otro pilar del sistema),
“Libertad es no tener que tomar ninguna decisión” (no es necesario decidir).
Este sistema de vida que abraza hace que un desconocido le encargue el cuidado de un maletín lleno de billetes, lo que motivará la codicia de su ex esposa, sus amigos, y hasta de sus conocidos, revelando la hipocresía de todos en torno al tema.
Néstor Cantillana escogió la pieza precisamente por la contingencia de la problemática que plantea. “Vi tantos buenos actores cesantes, tanta preocupación en la sociedad por la plata, que esta obra nos hizo sentido a todos”, cuenta el director, quien considera que la obra es “una comedia negra muy inteligente, protagonizada por una especie de quijotesco antihéroe, pues quiere vivir como anticapitalista en un mundo capitalista. Gospodin quiere vivir como desea; no es político, no es anarquista ni fundamentalista. Quiere vivir autárquicamente”.
Cantillana precisa que la obra planea un desafío en términos actorales, porque sólo con tres intérpretes se recrean muchos personajes y situaciones. Así, Él (Guilherme Sepúlveda) y Ella (Macarena Teke) intervienen como narradores e interpretan a todos los que rodean a Godospin, y sólo este último se mantiene inalterable, siempre fiel a sí mismo.
En términos de escenografía, la acción transcurre en una especie de set de canal de internet, donde se advierte la precariedad pese a las pantallas y las cámaras. Hasta ahí llega Gospodin, dispuesto a participar en esta especie de recreación de su vida propuesta por Löhle. Entonces, en una suerte de teatro en el teatro, el público verá como Él y Ella se convierten en otros, caracterizándose a su vista.
Néstor Cantillana, que oficia de director por quinta vez (antes dirigió, entre otras, “Cada vez que ladran los perros”, “El amor es un francotirador” y “Sueño con revólver”) cuenta que hay una cita de Heidegger en el prólogo que refleja muy bien la obra: “Sucede que alguien osa ser totalmente el mismo, un ser humano individual”. Y eso es Gospodin, alguien que quiere ser él mismo, en absoluta consecuencia con lo que siente.
DONDE: Teatro de la Palabra (Crucero Exeter 0250.Providencia)
CUANDO: Estreno 25 de noviembre
Viernes y sábado 21:00 horas, domingo 20:00.
CUANTO$8000 entrada general y $4000 estudiantes y tercera edad